Nosferatu: Entre la reverencia y el terror

La nueva versión de “Nosferatu” (2024), dirigida por Robert Eggers, reimagina el clásico del cine expresionista alemán de 1922 de F.W. Murnau, aportando una visión contemporánea al relato del vampiro. La película sigue a Thomas Hutter (Nicholas Hoult), un agente inmobiliario que viaja a Transilvania para cerrar un trato con el enigmático Conde Orlok (Bill Skarsgård). Mientras Hutter se adentra en los misterios del castillo, su esposa Ellen (Lily-Rose Depp) comienza a experimentar inquietantes visiones que la conectan con el siniestro conde.

Eggers, conocido por su meticulosa atención al detalle en filmes como “The Witch” y “The Lighthouse“, recrea con maestría la atmósfera opresiva y sombría característica del expresionismo alemán. La estética visual de la película destaca por sus escenarios cuidadosamente diseñados, iluminación contrastada y una paleta de colores que evoca la angustia y el misterio de la narrativa original. Sin embargo, aunque la ambientación es impecable, la profundidad psicológica de los personajes no alcanza el nivel de sus trabajos anteriores.

Bill Skarsgård ofrece una interpretación del Conde Orlok que se aleja de representaciones anteriores, presentando un ser grotesco y perturbador que encarna el horror en su forma más pura. Su caracterización aporta una nueva dimensión al icónico vampiro, destacándose como uno de los puntos más fuertes de la película. Por otro lado, Lily-Rose Depp brilla en su papel de Ellen, entregando una actuación comprometida que añade capas de complejidad al personaje y contribuye significativamente al terror atmosférico del filme.

A pesar de estas fortalezas, la película presenta un tono excesivamente teatral en ciertos momentos, lo que afecta el ritmo y puede hacer que algunas escenas se sientan prolongadas. Esta teatralidad, si bien busca rendir homenaje al estilo original, en ocasiones resta dinamismo a la narrativa. No obstante, cuando Eggers se centra en los elementos de horror, la película alcanza su máximo potencial, ofreciendo secuencias que combinan de manera efectiva la ambientación, la música y la composición visual para crear una experiencia de terror gótico auténtica y envolvente.

En términos de innovación, “Nosferatu” se mantiene mayormente dentro de los límites esperados, sin asumir riesgos creativos significativos. Su reverencia hacia los clásicos de Murnau y la reinterpretación Werner Herzog al final de los 70, tienen gran culpa de aquellos. La excepción notable es la representación del Conde Orlok, donde Eggers introduce una visión fresca y perturbadora que revitaliza al personaje para las audiencias contemporáneas. Esta reinterpretación, junto con la destreza técnica del director, demuestra su capacidad para honrar el material original mientras aporta su sello distintivo.

En resumen, “Nosferatu” de Robert Eggers es una obra que destaca por su impresionante apartado visual y su capacidad para evocar el horror gótico clásico. Aunque presenta algunas debilidades en la profundización de los personajes y en el ritmo narrativo, la película ofrece una experiencia cinematográfica que deleitará a los amantes del género y a quienes aprecian las reinterpretaciones de los clásicos del cine.

Ficha técnica:

  • Título: Nosferatu
  • Año: 2024
  • Director: Robert Eggers
  • Guion: Robert Eggers, basado en la obra de Bram Stoker
  • Reparto principal:
    • Lily-Rose Depp como Ellen
    • Nicholas Hoult como Thomas Hutter
    • Bill Skarsgård como Conde Orlok
    • Aaron Taylor-Johnson
    • Willem Dafoe
  • Género: Terror, Horror gótico
  • Duración: 132 minutos